Quien trabaja en la industria textil sabe, obviamente, que la materia prima es una parte esencial del trabajo.
No obstante, escoger proveedores que disponen de telas de calidad y poder identificar cuando los productos no son los adecuados puede ser decisivo para el éxito o el fracaso de la empresa.
¿Quiere saber por qué? ¡Continúe la lectura!
Fabricar buenos productos
Aunque muchas industrias textiles se preocupen por el resultado final de las prendas, ni todas ellas se fijan lo suficiente en la calidad de la materia prima. Este error puede tener graves consecuencias.
Ya que la calidad del producto final es una de las características que hará que la industria sobresalga ante su competencia, preocuparse con el inicio del proceso —es decir, con la calidad de la materia prima— es el primer paso para poder entregar productos de calidad y obtener competitividad.
Además, la satisfacción del cliente intermedio y final es decisiva para impedir la pérdida de clientela.
Si el consumidor adquiere un artículo y con aproximadamente tres meses se empieza a desteñir y desgastar, probablemente no va a adquirir los productos de la misma marca nuevamente.
Prevenir fallas
Pequeñas fallas pueden ocurrir, pero lo ideal es que sean evitadas al máximo para que no se acumulen y acaben perjudicando la productividad de la industria.
Las materias primas pueden traer problemas. Un ejemplo es cuando la tela llega con agujeros, imperfecciones o tonalidades diferentes en un mismo rollo.
Estas fallas pueden aumentar la cantidad de tela necesaria para la fabricación de una prenda, además de provocar la producción de productos de baja calidad.
En lugar de notar la falla al final del proceso, al adquirirse buenos tejidos estos pueden ser cambiados y todo ese trastorno y perjuicio es evitado.
+ Descubra más: Control de calidad textil y la preparación del tejido
Optimizar la producción
Imagínese un proceso productivo sin fallas, con una producción automatizada, sin pérdidas de materiales por falta de calidad de las piezas o paradas en algún proceso.
Con toda seguridad, la productividad aumentaría, ¿no es cierto? Es eso lo que ocurre cuando la calidad de la materia prima es analizada atentamente y la maquinaria posee la tecnología necesaria para hacerlo.
Aumentar los lucros
El desperdicio de materia prima no es algo raro. Ya sea por falta de automatización o de información, es algo que ocurre en varias industrias. Este desperdicio afecta el ROI y, consecuentemente, reduce los lucros.
Cuando es eliminado, los lucros consecuentemente aumentan. Monitorear los datos técnicos del material básico para la confección ya es suficiente para programar el tendido y corte sin que haya desperdicio.
+ Descubra más: ¿Qué es el control de calidad? ¿Cómo funciona en la industria textil?
Descubra cómo hacer el control de calidad de la materia prima al momento de recibirla
Para evitar inconvenientes y obtener los beneficios del uso de materia prima de calidad, es necesario adoptar métodos de manufactura más modernos, invertir en la optimización de los procesos administrativos y también en equipos.
Estas actitudes facilitan el cumplimiento de las normativas del gobierno y, por añadidura, proporcionan una mejor calidad a los procesos de la industria.
Además, pueden hacerse pruebas regulares para verificar la calidad del material en el momento que llega al stock.
Felizmente la industria ha pasado por transformaciones que hacen posible una evolución en el control de calidad. Con la tecnología como aliada, ahora es posible realizar la automatización de diversos procesos, incluyendo la verificación de la calidad del rollo.
La automatización textil hace posible verificar informaciones reales sobre cada rollo de tela, incluyendo el metraje, área útil, gramaje, rendimiento. Todo eso con una sola máquina, como la Revisadora de Tejidos.
También es posible realizar pruebas químicas y físicas para descubrir la estabilidad de la tela, la solidez del color al lavado, la iluminación, el aumento de la temperatura y otras características que aseguren que el producto final tendrá la calidad esperada.
La Lavadora de Muestras, por ejemplo, en 20 minutos logra determinar por medio de ciclos de lavado y secado, el porcentaje de cuánto se encoje la tela. La Preparadora de Tela de Punto realiza la revisión y la preparación del lote de tejido de punto para el proceso de tintorería.
Ya el Sensor Regla Digital, monitorea la variación del ancho de los tejidos y puede ser acoplado en varios equipos para mejorar el control de calidad.
Sin embargo, para que realmente funcione, el control de calidad debe ser visto como una responsabilidad de toda la empresa, además de los colaboradores y proveedores.
El gestor necesita tener esa conciencia para distinguir en el producto proporcionado, algo más que una materia prima en la industria textil. Al final, como fue demostrado, la calidad del tejido afectará el resto del proceso.
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